RECORDANDO A NUESTRA GRAN MADRE SIERVA DE DIOS AMADORA GÓMEZ ALONSO
Un día como hoy murió Nuestra Madre Fundadora, Amadora Gómez Alonso, en el año 1976 en su nombre de "Amadora" Dios quiso que llevara su misión: Sólo el Amor, Su Reino, el Reino de su corazón. Unidad y caridad en todo nuestro apostolado; con los pobres en misión, en colegios pues para ella era como su "laboratorio de almas", catequesis para que conozcan el Amor de Dios, sólo el amor puede salvar, y en todo tipo de apostolado... Justo hoy, día de la Santa Cruz en un Coma diabético. Antes de dejarnos, besó los pies de sus hijas pidiéndoles perdón si había hecho sufrir en algo, ante la exigencia de ese fuego-ardoroso que llevaba dentro por extender su Reino, con esa misma humildad que lo hizo Jesús en la Última Cena al lavar los pies. Justo a las 3.30 de la tarde, ella murió diciendo sus últimas palabras y fijando sus ojos trascendentes en el cuadro del corazón de Jesús que tenía frente a su cama: "HE TERMINADO LA OBRA DEL CORAZÓN DE JESÚS. TODO LO TENGO TERMINADO. DOY MI VIDA POR LA CONGREGACIÓN Y POR LA IGLESIA COMO SIEMPRE LO HE HECHO".
Otro acontecimiento de gran alegría es el ingreso de jóvenes que siguen diciendo un SÍ GRANDE a Dios en su vocación. Hna. Matilda Abuti Malingue, que en la Casa General de Madrid pronunciará un sí grande en este día, e ingresará al Noviciado. Todas tus hermanas Celadoras estamos unidas en oración por tu fidelidad. ¡Muchas Felicidades Hermana! Dios espera mucho de ti.
Y la gracia desde el Cielo se sigue derramando gracias a la intercesión de M. Amadora, ya que en México dos jovencitas más, también expresan su sí y entran al Noviciado: Estefanía y Fernanda. Son pequeñas Celadoras y desde donde estamos les deseamos muchas bendiciones y que sean muy felices porque vale la pena seguir a Cristo y dejarlo todo por el TODO.
Pero nuestra alegría sigue en aumento. Y es que en el Perú estos días también nuestras hermanas celebraron el ingreso al postulantado de Cenia. Ella postula a esta vida de ser totalmente de Dios, de amarle y dedicarle todos nuestros días a Él, Nuestro Rey, al Corazón de Jesús, de llevarle muchas almas y darlo a conocer a todo el mundo. ¡Ánimo Cenia y felicidades!... Todas hemos empezado dando pasitos, subiendo escalones. Nos unimos a ti y que seas muy fiel.
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